January 21, 2011

La reina de la estupidez...

Llevaba poco mas de un mes complicandome la vida tratando de verle el lado negativo a todo lo que se presentaba en mi relación. Durante ese tiempo me dedique a encontrar pretextos para estar enojada por una situación que se salió de control el 17 de diciembre. Pretextos me sobraban para hacer pancho y echarle la culpa a el de absolutamente todo lo que pasaba por mi cabeza. Cada 3 o 4 días explotaba y le decía que ya no quería nada con el, que no era feliz, que no estaba tranquila, que me había lastimado y q no lo toleraba... El se mantenía callado, escuchando, aguantando y esperaba a que me calmara para decirme que si yo no era feliz entonces tomara una decisión. Así fueron las ultimas cinco semanas... hasta antier...

El miércoles en la noche fuimos al cine y en un momento de descontrol mental, me voltee y en medio de la función le dije: ya no quiero andar contigo, se quedó callado, no pregunto nada y espero a que terminara la función. Cuando salimos del cine y mientras caminabamos al estacionamiento me preguntó el porque de esa decisión, y solte la letania de siempre, que si ya no estaba tranquila, que no era feliz, que me cagaba su indiferencia, que ya estaba harta de esa situación, que me había lastimado y bla, bla, bla.... Solo contesto, si ya no te esta haciendo bien respeto tu desición.

Me frustro tanto que no me dijera que no quería cortar, que hice un pancho digno de niña de 5 años, me baje del coche y empece a caminar esperando a que el corriera a buscarme. Evidentemente eso no paso, así que me quedé como reverenda idiota y con mis honores tuve que regresar, subirme al coche y quedarme callada.

No es necesario que diga que apartir de ese momento, su tranquilidad se volvió enojo, me dijo muchas cosas, entre ellas que no iba a tolerar ni un solo drama mas (con toda la razón), que siempre me quejaba de todo, que todo reclamaba y que basicamente el tampoco queria estar conmigo. Encontré al hombre irritable, que guardó durante tanto tiempo en medio de la racionalidad,... Y entonces, se me cayó el mundo en pedacitos.

Me dijó que tenía que hacerme responsable de mis decisiones y que no podía jugar con la gente como se me pegara la gana, que despuès de tantas veces de mandarlo al demonio en ese momento me tomaba la palabra y que entonces, esa relación se acababa en ese preciso momento. Que estaba harto de mi y de mis múltiples cambios de humor, que no tenía caracter para sostener una decisión, pero que para mi mala suerte el si la tenía. Que yo hacia que detonara todas esas cosas malas que estaban guardadas desde hace dos años y que apesar de todo el había seguido ahí, pero que empezaba a pensar que ya no tenia caso estarlo. Me pidió que me bajara del coche y que con eso diera por terminada esta historia.

El miércoles no dormí nada, el jueves durante el día estuve en estado emo, y en la noche al ver que no marcaba, que no había ni un solo mensaje en la pantalla de mi celular, descubrí cuanto la había cagado.

Millones de veces me dije a mi misma que tenía que cambiar mi caracter y mi explosividad, que de por si durante los ultimos años no me habían traido nada bueno. Y no entendi.... No entendí nada... HASTA AHORA....

Entendi que no todos piensan y sienten como yo y no puedo obligarlos a que lo hagan.
Entendí que cada persona tiene diferentes formas de demostrar sus sentimientos.
Entendí que no todo en esta vida son palabras de amor, por el contrario esas se van y los hechos se quedan.
Entendí que cada quien maneja sus procesos de forma distinta.
Entendí que los berrinches de niña idiota no dejan nada bueno, por el contrario, alejan a la gente.
Entendí que hay que darle su justo valor a las cosas, no mas, no menos.
Entendí que un hecho aislado no es el fin del mundo, que todo lo que esta al rededor es lo que en realiad cuenta.
Entendí que el vomito verbal, por mas que saque mi coraje, no aporta nada positivo.
Entendí que si quiero estar con alguien, tengo que aceptarlo con sus cualidades y defectos.
Entendí que no debo interpretar las cosas, porque puede salir contraproducente.
Entendí que no debo juzgar sin antes saber el porque de las cosas.
Pero sobre todo entendí, que por mas que alguien luche por estar conmigo, si yo pongo las trabas, al final del camino se va a alejar...

Talvez sea demasiado tarde.... pero por fin lo entendí.  




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